Autor: Luis R. Orozco, LCSW –

El manejo de conflicto es un proceso esencial, que si se maneja adecuadamente puede fortalecer cualquier tipo de relación. Para que esto suceda, típicamente se requiere tener la habilidad de reconocer el problema y de manejar el conflicto de una manera racional y balanceada. Aquí hay una lista de técnicas para la resolución de conflictos.

Hable con su compañero/a sobre la importancia de tomar “tiempo para calmarse” o “tiempo fuera”. Deje que el/ella sepa que esto es a veces necesario para poder tranquilarse y que la conversación puede continuar más tarde o al siguiente día.

Reconozca las señales del enojo. Las señales pueden ser físicas o emocionales. Aléjese de la situación, lugar o persona y reflexione antes de tratar de resolver cualquier problema.

NO insulte, no levante su voz, no amenace y no use comportamiento intimidante. Vaya a un lugar donde pueda tranquilizarse y piense positivamente. Haga ejercicio, respire profundo o haga actividades físicas. No maneje, no tome bebidas alcohólicas o use drogas.

Ya que este tranquilo/a decida con su compañero/a un buen momento para continuar la discusión. Quizá sea una buena idea invitar a una tercera persona de confianza para que pueda servir de intermediario.

Usted tiene el derecho de expresar sus ideas, pero no tiene el derecho de expresarse de una manera abusiva usando tácticas intimidantes o lenguaje destructivo.

Para que la comunicación sea efectiva, las personas involucradas tienen que escucharse mutuamente y no enfocarse solo en quién tiene la razón.

La buena comunicación requiere compromiso y disponibilidad para negociar. Es importante tomar conciencia y darse cuenta de que si alguien gana el otro pierde y la buena comunicación se puede dañar.

Recuerde lo siguientes puntos:

  • El enojo es una señal, relájese y piense positivamente
  • Tome “tiempo fuera” cuando se sienta enojado/a
  • A veces es normal sentirse inseguro y confundido
  • La mayoría de las cosas por las que la gente discute son insignificantes
  • Es beneficioso reconocer de donde viene el coraje (p. ej. un resentimiento o problemas no resueltos)
  • Es normal cometer errores, es por eso que los lápices tienen borrador
  • Las personas van a actuar de la manera que ellos quieran, no de la manera que usted quiere
  • Uno es responsable de sus propios actos, no de los demás